Yola-underground. Cuento

Maria Semikova

Bajo la ciudad, en los laberintos de metro, vive una peque?a maga. Se llama Yola. La familia de Yola se mudо aqu?, cuando hubo un colapso en su cueva de la monta?a. El «Underground» le gusta a Yola de todos los puntos de vista: aqu? no hay ni d?a ni noche, pero hay grandes salas luminosas. Los padres de Yola son muy hospitalarios.

Yola-underground

Cuento

Maria Semikova

© Maria Semikova, 2018

ISBN 978-5-4490-8953-3

Создано в интеллектуальной издательской системе Ridero

Bajo la ciudad, en los laberintos de metro, vive una peque?a maga. Se llama Yola. La familia de Yola se mudо aqu?, cuando hubo un colapso en su cueva de la monta?a. El «Underground» le gusta a Yola de todos los puntos de vista: aqu? no hay ni d?a ni noche, pero hay grandes salas luminosas. Los padres de Yola son muy hospitalarios. Tan pronto como la familia se asentо, los visitо la rata llamada Glina. Los huеspedes en la casa son una buena se?al. Glina trajo una peque?a bolsa, bien atada con una talla de hierba. En la bolsa hab?a polvo de cafе. La huеsped compartiо con los magos la receta de la preparaciоn de una bebida antigua.

***

Caminando por los t?neles, Yola llegaba cada vez mаs y mаs lejos. Ella sab?a que el agua pod?a aparecer a cualquier profundidad, y si bajara mаs, hab?a una posibilidad de encontrar un r?o subterrаneo. Pues, esto sucediо. Yola escuchо un chapoteo y vio las canchas semejantes a las gоndolas espa?olas

Los viajeros de tierra dicen que es necesario ir a lo largo de la orilla, siguiendo el movimiento del agua, ya que elige el camino mаs fаcil. No fue nada fаcil seguir el agua. Al elegir un camino fаcil, a veces se ca?a con el ruido. En uno de los umbrales de agua, el bote volcо. Resultо que la peque?a maga no sab?a nadar. Solo un hechizo le ayudо a salvarse.

***

En el techo de la cueva colgaban estalactitas. Yola vio la gente bajando por las cuerdas. Espeleоlogos. Embrujando, adquiriо el mismo aspecto. Ahora iba vestida con un casco y un mono. Los espeleоlogos se mov?an en las profundidades de la cueva. Corriendo a travеs de los enormes pasillos y pasando las estrechas hendiduras, Yola imaginо, en quе rincоn se acomodar?a, si vivir?a all?. Ella ten?a la esperanza de conocer a alguien de los magos.

A la luz de las linternas, la cueva parec?a ser roja, azul y verde. Despuеs de un tiempo, los viajeros se detuvieron en el centro de la sala en la orilla de un peque?o lago. La sala parec?a ser una casa abandonada. Yola recordо: una vez, mientras estaba sentada en la orilla, su madre le dijo: «Has crecido, pronto estarаs caminando solo en la cueva. Si te pierdes, cierra los ojos, imag?nate un hogar y trata de sentir su calor. Cuando tus palmas se calienten, di: „Caliеntame“. Y estarаs en casa».