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El Airecito – Сквознячок

Надежда Александровна Белякова

В сказке Надежды Беляковой "Сквознячок", переведенной на испанский язык Евгенией Луцковой, рассказано на испанском языке о том, как веселый и бесшабашный библиотечный Сквознячок из-за своего неугомонного характера часто попадает в трудные ситуации. Но он никогда не падает духом и находит вместе со своими друзьями выход из самых невероятных ситуаций среди сказочных приключений. Эта сказка – одна из цикла многочисленных сказок автора, которые объединяет названием «Сказки Надежды».

На испанский язык эту сказку перевела талантливый литературный переводчик Евгения Луцкова.

Надежда Белякова

El Airecito – Сквознячок

Despuеs del trabajo en la biblioteca, a Airecito le encantaba dar un paseo por la ciudad nocturna, volar sobre las callecitas vac?as y silenciosas y columpiarse en las ramas de los аrboles. Dar volteretas sobre los tejados de las casas. Y aquella noche todo iba igual que siempre, еl volaba sobre la ciudad y canturreaba:

?No soy un tsunami, ni un huracаn!

Y os lo digo por secreto —

soy mаs peque?o que una corriente,

Yo soy el hermanito menor de los Hermanos Vientos

?El Airecito de Biblioteca!

No siempre todo me va muy bien,

Y no soy rico yo tampoco,

En los estantes vivo entre los libros,

?Que no son pocos!

Soplando les quito el polvo del aburrimiento,

Y me encanta re?r en cualquier momento.

Vivo rodeado de baladas y cuentos,

?Se juega al escondite genial entre ellos!

Tambiеn me gusta hacer cosquillas

En los talones de mis amigos.

Pero si temes a resfriarte

?Conmigo mejor no encontrarte! …

Cuando en el silencio de la ciudad adormitada se o?a el llanto de un ni?o, Airecito se dirig?a en seguida a aquel sonido. Se acercaba con mucho cuidado para que nadie lo vea a la casa donde el ni?o no pod?a quedarse dormido. Se colaba por la ventana a la habitaciоn y empezaba a cantar unas nanas maravillosas en voz tan bajita que solo el bebе pod?a o?rlas.

Y as? fue esta vez, el Airecito le canturreaba una de sus bonitas nanas al peque?o:

?Dоnde viven los sue?os?

?Cоmo se puede llegar hasta ellos?

No puede responder el gatito,

No conoce un camino el elefantito,

Se calla en el estanque el sapito,

Nadie contesta a esa preguntita…

Y allа en los sue?os pasan maravillas,

?All? te esperan mаgicos cuentos!

?Se permite ser travieso hasta el amanecer!

?Y hay tantas cosas por hacer!

T? tienes un montоn de amigos all?

Que se aburren sin ti.

Acuеstate ya, ?Y no les hagas esperar!

Porque solo faltas t? por llegar.

Con los cantes y bailes alegres

?En los sue?os ellos te esperan!

Al ver que el ni?o se durmiо plаcidamente mientras escuchaba su canciоn, Airecito se fue a la calle por la ventanilla. Еl volaba hacia la biblioteca y pensaba:

”?Que dulces sue?os tendrа el ni?o! Incluso si estuviese malito ahora, por la ma?ana se despertarа alegre y animado. Porque esas nanas traen en s? un sue?o profundo y curativo, alegre y dulce. ?Quе suerte que yo sе tantas nanas! ?Hay para todos los ni?os de la ciudad! Algunas de ellas encuentro yo solito en los libros antiguos, y otras las compone el Bibliotecario en sus ratos de descanso. Еl trabaja en la Biblioteca municipal en la que yo paso la mayor parte del tiempo.”

As? pensaba nuestro Airecito volando por encima de la dormida ciudad. Al acercarse a la biblioteca, ha entrado por la ventanilla abierta y se ha acercado a la mesa redonda donde estaban sentados el bibliotecario Lectоrius y su nieta Adelina. Airecito como siempre ha llegado a la biblioteca para ayudar a sus amigos. Ellos estaban muy ocupados intentando restaurar un gran libro antiguo y se han alegrado much?simo al ver a Airecito. El bibliotecario le ha dicho:

– ?Oh, mi amigo Airecito! ?Llegas muy a tiempo! Nosotros no podemos finalizar esa labor tan delicada sin ti. Nadie es capaz de hacer este trabajo porque requiere tanta paciencia y agilidad los que solo t? tienes.

Adelina, la nieta del bibliotecario, ha continuado:

– Llevamos aqu? toda la tarde recuperando libros y manuscritos antiguos c